Renfe ha certificado su huella de carbono con AENOR utilizando la tecnología de Greemko, un avance destacado para un operador ferroviario cuya medición ambiental implica consolidar datos de numerosos proveedores, distintos sistemas de tracción y una infraestructura logística compleja.
Greemko aborda uno de los principales retos del sector: la dispersión y heterogeneidad de los datos necesarios para calcular la huella de carbono. Su plataforma permite automatizar la recopilación, validación y trazabilidad de la información, eliminando procesos manuales, errores y la dependencia de interminables hojas de cálculo.
La compañía ha presentado estas capacidades en Rail Live! 2025 (IFEMA Madrid, 26–28 de noviembre), donde mostró cómo su solución facilita una medición ambiental más fiable, eficiente y alineada con las exigencias actuales de sostenibilidad en el transporte ferroviario.
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